Este contenido ha sido patrocinado por el servicio de venta de coches usados de Carmerce y se basa en una experiencia personal directa.
"Quiero cambiar de coche... ¿Cómo debo vender mi coche actual?"
Esta es una pregunta que me hizo recientemente un conocido. Había contratado un coche eléctrico para reemplazar su vehículo de gasolina debido al aumento repentino en la distancia de su trayecto diario al trabajo.
Como nunca había vendido un coche antes, estaba preocupado sobre cómo deshacerse de su vehículo actual.
Vender tu coche usado no es tan difícil como podrías pensar.
Esto se debe a que existe una aplicación que te permite gestionar fácilmente desde tu móvil todo el proceso de compra y venta de coches usados, incluyendo préstamos.
En esta publicación, te mostraré cómo usar la aplicación Carmerce para comprobar cómodamente el valor de mercado de tu coche y cómo venderlo.
Valor de mercado de un Sorento de 4 años,
"Comprobé fácilmente el valor de mi coche con el servicio Pro de venta de Carmerce"
Valor de mercado de un Sorento de 4 años,
"Comprobé fácilmente el valor de mi coche con el servicio Pro de venta de Carmerce"
Carmerce es una aplicación de comercio electrónico de coches usados lanzada en noviembre de 2022, y ya ha superado el millón de usuarios acumulados.
Una de sus grandes ventajas es la facilidad de uso: solo necesitas un smartphone para gestionar cómodamente el proceso de venta de tu vehículo desde cualquier lugar y en cualquier momento.
Para empezar a vender tu coche, descarga la aplicación Carmerce desde Google Play Store o Apple App Store.
Una vez descargada la aplicación, inicia sesión e introduce el número de matrícula de tu vehículo para comprobar su valor de mercado.
No importa si no recuerdas exactamente qué opciones incluiste al comprar el coche o qué reparaciones se hicieron después de un accidente.
¡No te preocupes!
Al introducir solo el número de matrícula en la aplicación Carmerce, se consultan automáticamente el kilometraje, el año y el historial de accidentes del vehículo. Una ventaja es que incluso las opciones se actualizan automáticamente, por lo que apenas tienes que introducir información manualmente.
Además, la IA de Carmerce comprueba automáticamente el valor de mercado de tu coche, lo que hace que esta aplicación sea útil para aquellos que quieren saber cuánto vale su vehículo antes de venderlo.
Si quieres vender tu vehículo, simplemente haz clic en la opción "Solicitar venta de mi coche".
En mi caso, decidí utilizar el servicio Pro de venta de coches.
El servicio Pro de venta de coches te permite vender tu vehículo sin tener que encontrarte con un concesionario y sin deducciones adicionales in situ, recibiendo el precio de subasta exacto.
Un tasador profesional de Carmerce visitará el lugar y la fecha que especifiques para inspeccionar tu vehículo.
El tasador profesional de Carmerce solo está allí para ayudar con el proceso de subasta,
y no tiene relación directa con la venta del vehículo, así que no te sientas presionado a vender.
Además, el servicio Pro de venta de coches de Carmerce te permite ver el precio de la subasta en tiempo real a través de la aplicación,
y también recibir notificaciones del inicio y fin de la subasta por KakaoTalk.
Puedes decidir vender dentro de las 72 horas posteriores al final de la subasta, dándote tiempo suficiente para considerarlo.
La subasta dura un total de 48 horas, pero si quieres vender tu coche lo más rápido posible, ¡puedes usar esta función!
El tasador profesional de Carmerce vino en la fecha y lugar que reservé en la aplicación y examinó minuciosamente mi coche.
El proceso duró entre 15 y 30 minutos.
Se realiza muy rápidamente, lo que es una gran ventaja ya que no te quita mucho tiempo.
Principalmente, revisan el estado de las opciones, el funcionamiento normal de todas las funciones, y cualquier rasguño o daño.
También examinan minuciosamente cualquier modificación para asegurarse de que no haya problemas en la venta del vehículo.
En mi caso, aunque no había partes dañadas, un pequeño rasguño en la llanta que me hice al aparcar hace tiempo resultó ser un factor de depreciación.